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Cómo hacer que tu apartamento sea apto para gatos: 10 maneras efectivas

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By Nicole Cosgrove

Gato atigrado mirando hacia un lado.

Los gatos son maravillosas mascotas de apartamento. No necesitan mucho espacio, pueden ir al baño en interior y se conforman con estar solos en casa durante periodos de tiempo. Tanto si tienes un nuevo gato como si estás a punto de tener uno, es importante que te asegures de que tu gato está a salvo en tu apartamento, ¡y de que tu apartamento está a salvo de ser destruido por tu gato!

He aquí las mejores formas de hacer tu apartamento a prueba de gatos para ayudarte a preparar tu espacio para tu nueva mascota.

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Las 10 maneras de poner tu apartamento a prueba de gatos

1.  Comprueba ventanas y mosquiteras

Gato mirando a través de la ventana.
foto por: Alex Gbadamosi, Unsplash

Las ventanas son fantásticas puertas de escape para los gatos. Como los gatos son trepadores por naturaleza, la altura no les disuade, y esto a veces provoca escapadas accidentales.

No tienes que mantener las ventanas cerradas hasta el fin de los tiempos sólo porque tengas un gato, pero debes asegurarte de que las mosquiteras se bloquean en su sitio en lugar de salirse. Si alguna mosquitera tiene agujeros, hay que arreglarla o cambiarla.


2. Protege los cables

Los cables y cuerdas colgantes son juguetes fantásticos, pero pueden ser peligrosos para tu gato. Envolver los cables y agruparlos los hará menos interesantes. También es buena idea desenchufar los cables que no necesiten estar constantemente conectados.

A los gatitos jóvenes a veces les gusta masticar cuerdas, lo que puede ser un hábito peligroso. Aunque debes entrenar a tu gato para que no lo haga, un cable desenchufado es mucho menos peligroso.


3. Mover objetos rompibles

Gato de color grisáceo oscuro sobre una balda de madera.
foto por: BUMIPUTRA, Pexels

Los gatos son expertos en vaciar estanterías, encimeras y armarios. Antes de dejar suelto a tu gato en tu apartamento, estate atento a lo que hay a su alcance. Debes guardarlo si tu gato puede volcarlo.

Aunque tengas una política estricta de “nada de gatos en el mostrador”, no puedes hacer cumplir la norma cuando no estás en casa. Es mejor mantener las cosas seguras y evitar dejar fuera cosas que se puedan romper.


4. Tapa el cubo de la basura

Una simple tapa en tu cubo de basura os ahorrará a ti y a tu gato muchos problemas. También podría ahorrarte una factura enorme del veterinario. Un cubo de basura abierto es increíblemente atractivo para un gato, pero esto puede causarle todo tipo de problemas.

Objetos como huesos o hilo dental pueden causar obstrucciones o riesgos de asfixia que requerirán una visita urgente al veterinario. Aunque tu gato no encuentre nada peligroso, probablemente no querrás limpiar el desorden que deja cuando tira la basura.


5. Haz que los objetos de tu gato sean accesibles

Gato blanco comiendo de un comedero.

Aunque hay muchas cosas que seguro que quieres mantener alejadas de tu gato, también hay cosas a las que quieres que tenga fácil acceso. Los comederos y las cajas de arena deben colocarse en lugares tranquilos y de fácil acceso para tu gato.

Enseñarles dónde está cada caja de arena, dónde está su comida y qué les pertenece les permite saber qué pueden y qué no pueden hacer. Cuanto más fácil le resulte a tu gato acceder a estas cosas, más probable será que las utilice.


6. Suministros de limpieza bajo llave

Tener una mascota en casa a menudo significa que tendrás que hacer una limpieza extra. Los productos de limpieza que se dejan fuera pueden convertirse en juguetes, y los gatos pueden lamer las manchas que acabas de limpiar en el suelo o la encimera.

No sólo debes mantener los productos de limpieza bajo llave, sino que también debes considerar la posibilidad de utilizar productos de limpieza no tóxicos para no tener que preocuparte de que tu gato se envenene accidentalmente.


7. Cierra la lavadora y la secadora

Lavadora sobre una pared de color azul.
foto por: FabrikaSimf, Shutterstock

La curiosidad mató al gato, como suelen decir. Este dicho es especialmente cierto para las lavadoras y secadoras. Las lavadoras huelen bien para tu gato porque huelen como tú. Mantén siempre cerrada la tapa de la lavadora para que tu gato no pueda meterse dentro. También es buena idea comprobar la lavadora antes de encenderla para asegurarte de que tu gato no se ha metido mientras la cargabas.

Las secadoras son espacios cálidos y acogedores en los que acurrucarse, pero peligrosos si tu gato sigue en el tambor cuando la enciendes. Asegurarse de que la puerta permanece cerrada y comprobar la máquina antes de encenderla puede evitar lesiones no deseadas.


8. Asegúrate de que las plantas de interior son seguras para los gatos

Los lirios, el aloe vera y muchas otras plantas de interior populares son tóxicas para los gatos. Si hay plantas tóxicas, deshazte de ellas y sustitúyelas por otras aptas para gatos. A los gatos les gusta masticar las plantas, así que asegúrate de tener unas que no les hagan daño.


9. Cierra la tapa del váter

Imagen de un váter.
foto por: Hakim Santoso, Pexels

Las cisternas abiertas pueden causar muchos problemas. Por un lado, a menudo contienen productos químicos de limpieza agresivos. Y dos, están llenas de gérmenes. Por último, los gatos pueden caerse dentro del cuenco.

Los gatos ven una taza de váter abierta como una taza de agua adicional (asqueroso, pero cierto). Si intentan beber de ella, corres el riesgo de envenenamiento, enfermedad o de que se caigan dentro y se ahoguen.


10. Guarda los alimentos

A los gatos les encanta el sabor de muchos alimentos humanos, pero muchos de ellos no son aptos para su consumo. Como los gatos son ágiles y creativos en sus esfuerzos por llegar a lo que quieren, la mejor forma de evitarlo es guardar las cosas sistemáticamente.

Limpia regularmente la mesa y las encimeras, y guarda los restos de comida en la nevera o en armarios donde tu gato no pueda acceder a ellos.

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Conclusión

Muchos objetos domésticos cotidianos pueden ser peligrosos para un gato. Dedicar tiempo a poner tu apartamento a prueba de gatos puede garantizar tu seguridad y la de tu gato. Aunque puede que tengas que supervisar a tu nuevo gato durante un tiempo y enseñarle las normas, pronto será un hogar feliz para que disfrutéis de vuestra nueva vida juntos.


Crédito de Imagen Principal: Daniel Zopf, Unsplash

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