Cómo evitar que mi perro monte: 8 consejos y trucos
Ultima actualización
Es normal que nuestros perros nos avergüencen de vez en cuando. Ya sea haciendo caca delante de un restaurante lleno, soltando gases en público o ignorando tu llamado.
Es tan descarado que lo amas. Pero a veces se pasan, sobre todo cuando montan todo.
¿Te suena? Que no cunda el pánico porque a todos nos pasa. Este comportamiento es más común de lo que crees y no siempre se debe a que está excitado sexualmente. Sea cual sea el motivo, tiene que parar. Ya sea por el bien del perro vecino o por tus mejillas ruborizadas.
Pero, ¿cómo? Echa un vistazo a los siguientes consejos:
¿Por qué sucede?
Primero que nada, hay que determinar por qué lo hace. Así, podrás frenarlo más eficazmente.
Es beneficioso meterse en la cabeza de tu perro para saber qué camino seguir.
Entonces, ¿por qué ocurre? Veamos las razones más comunes.
Comportamiento sexual
La monta y la masturbación son conductas normales en todos los perros y perras. Algunos lo hacen por más que estén castrados o esterilizados. Los machos incluso pueden presentar erecciones y eyacular.
Esto suele ir acompañado de conductas coquetas: como dar zarpazos, inclinarse, lamerse y levantar la cola. A todos los animales les pasa, pero no lo dejes pasar.
Comportamiento de juego
Está garantizado que al menos un perro montará a otro durante juegos grupales, pues es algo usual. Los perros mal socializados que no saben jugar montan en exceso y se excitan. Hay que vigilar este comportamiento, ya que a otros canes no les hará gracia.
Sobreestimulación o estrés
Muchos perros recurren a la monta porque no saben lidiar con situaciones estresantes o excitantes. Dado que sus emociones se vuelven intensas e incontrolables, redirigen su excitación o estrés hacia lo que tengan a mano.
La sobreexcitación es una de las principales razones por las que un cachorro monta.
Es común que los perros monten cuando quieren ejercer su dominio en un grupo o cuando tantean el terreno para averiguar qué lugar ocupa en la manada.
Comportamiento compulsivo
Si no para de hacerlo y siempre se sale con la suya, se volverá un hábito.
Es difícil detenerlo cuando ya está acostumbrado. Ten paciencia porque no es culpa suya, sino de sus dueños que permitieron tal comportamiento. ¡Por suerte, nunca es tarde para hacer algo al respecto!
¿Podría deberse a un problema de salud?
Sí, es posible. O está confundido y no entiende por qué se siente mal o le pica y necesita rascarse.
Las afecciones médicas (como las infecciones urinarias, los problemas de próstata o el priapismo) pueden ser otro causante. Por tanto, si te quedaste sin opciones y sigues sin entender el por qué, te aconsejamos llevarlo al veterinario. Probablemente, no sea nada preocupante, pero debes descartar cualquier problema de salud.
Esperemos que ahora sepas por qué tu perro se encuentra juguetón. Si no es así, ¡no te preocupes! Tenemos 8 consejos para que puedas ponerle fin a este comportamiento vergonzoso.
Recuerda que los perros son diferentes y no todos los trucos funcionan. Es fundamental que pruebes cada uno de ellos para determinar cuál se adapta mejor a tu perro. Puede que necesites desplegar unas cuantas tácticas para evitar el impulso, pero sólo hace falta una para que funcione. ¡Manos a la obra!
Los 8 trucos y consejos para evitar que tu perro monte
1. Deshazte de los desencadenantes ambientales
Huelga decir que si reconoces ciertos estímulos ambientales que hacen que tu perro comience a montar, debes eliminarlos antes de que el comportamiento se vuelva un hábito y se transmita fácilmente a otros objetos o personas.
2. Utiliza técnicas de distracción
Si eliminar los desencadenantes no funciona, es hora de sacar tu bolsa de juegos para perros. Muchos no entienden este paso porque es como si lo premiaras por hacerse el tonto, ¿verdad? Pues no, se trata de distraerlo en el momento justo. Asegúrate de elegir un juguete o una actividad que el perro no pueda hacer mientras monta. Piensa en algo que sea físicamente imposible de ejecutar en simultáneo: correr, nadar o buscar una pelota pequeña.
Apenas notes que se puso juguetón, distráelo y haz que adopte un comportamiento físicamente incompatible (por ejemplo, grita como si hubieras visto una ardilla bestial y corre al patio). Puede que te sientas ridículo, pero es muy probable que te siga y se olvide de montar.
3. Desalienta el comportamiento
Este suele ser el paso más acertado y fácil. Como casi todo en la vida, las cosas más sencillas se pasan por alto.
Sea cual sea la orden que le hayas enseñado (como “no”, “déjalo” o “vete”), debes implementarla. En cuanto se aferra a su víctima, dile que no. Si te ignora, vuelve a gritarlo y tira de él. Y si no puedes apartarlo, quítale lo que lo pone nervioso.
Si emites una orden fuerte, tajante y firme, entenderá que se está portando mal.
4. Esterilizar o castrar
A veces, la única forma de impedir que se desaten las hormonas sexuales es cortando por lo sano. Así que si tu mascota no ha sido castrada o esterilizada, llegó el momento de consultarlo con el veterinario. Se demostró que la castración y la esterilización reducen los comportamientos sexuales hasta un 70 %. Salvo que pienses reproducirlo, no hay ninguna razón para mantenerlo intacto.
No sólo eso, también es beneficioso porque reduce el riesgo de problemas de salud graves y previene el nacimiento de cachorros no deseados, por nombrar un par.
5. Tiempo fuera
No, este paso no consiste en dejarlo a solas con su almohada preferida. En realidad tienes que llevarlo a un lugar donde no pueda montar nada.
El tiempo fuera funciona con muchos perros no sólo porque los aparta de la situación, sino porque los distrae. En su lugar, piensan qué hicieron para merecer tal trato.
Elige una habitación donde no haya gente ni juguetes. Cierra la puerta y espera uno o dos minutos. Luego, cuando haya pasado el tiempo, deja que salga y actúa como si nada hubiera pasado. Si se hace el tonto de nuevo, repite el paso hasta que capte el mensaje.
6. Practica el adiestramiento
Cuando un perro monta, establece autoridad, pero no significa que está a cargo. En realidad, está corroborando si los demás lo aceptan y qué lugar ocupa en la manada.
Puedes practicar el adiestramiento y fomentar la obediencia para suprimir cualquier comportamiento dominante. Así, no sólo lo adiestras para que deje de montar, sino que también estimulas su cerebro e incentivas que te escuche.
7. Evita la situación
Si sabes que tu perro monta en determinadas situaciones y los trucos anteriores no surten efecto en él, tendrás que evitar esas situaciones.
No siempre se puede, pero si ciertos juguetes lo ponen nervioso o hay perros en el parque canino local que le interesan, no vayas.
8. Llama a un profesional
A veces, simplemente no entendemos la razón. Pero no hay nada que temer.
Un profesional podría ayudarte. Ponte en contacto con alguien que afirme tener experiencia tratando este comportamiento anormal e investiga quién es antes de comprometerte económicamente con él. Por suerte, tiene solución.
En Conclusión
Ahora sabes que puedes controlar la monta. ¡No tiene por qué ser así!
Se trata de comprender por qué lo hace y cómo abordarlo. Puedes erradicar el comportamiento atroz sacándolo de la habitación, utilizando órdenes claras o evitando determinadas circunstancias.
Si quieres ver resultados inmediatos, tienes que ser constante y persistente. Y si nada funciona, siempre puedes buscar ayuda.
Crédito de Imagen Principal: Koldunova Anna, Shutterstock
