Bulldog victoriano vs. bulldog inglés: Principales diferencias
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Los bulldogs son una raza muy antigua que se remonta al menos al siglo XVII . Han llegado a ser sinónimo de “britanidad”, y se utilizaron a menudo en la Segunda Guerra Mundial para representar al primer ministro Winston Churchill. El Reino Unido está muy orgulloso de su raza favorita, por no decir otra cosa.
¿Pero sabías que hay dos tipos diferentes de bulldogs británicos?
Es verdad. El más común es el bulldog inglés, pero hay otro tipo llamado bulldog victoriano. Están muy relacionados, y puede que no sea fácil distinguirlos a primera vista, así que hemos elaborado una guía práctica para distinguirlos.
Diferencias visuales
Características Generales
El bulldog victoriano antiguo y el bulldog inglés tienen muchas similitudes, pero tienen un conjunto de características únicas. Vamos a desglosarlo.
- Altura media (adulto): 40 – 50 cm
- Peso medio (adulto): 25 – 35 kg
- Esperanza de vida: 10 – 12 años
- Necesidad de ejercicio: 20 min/día
- Necesidades de aseo: Bajo y fácil
- Apto para familias: Sí
- Admite otros perros: Sí
- Adiestrabilidad: Moderado
- Altura media (adulto): 40 -45 cm
- Peso medio (adulto): 20 a 25 kg
- Esperanza de vida: 8 – 10 años
- Necesidad de ejercicio: 30 min/día
- Necesidades de aseo: Bajo y fácil
- Apto para familias: Sí
- Admite otros perros: A menudo
- Adiestrabilidad: Fácil
Visión general del bulldog inglés
Éste es el perro que probablemente te imaginas cuando piensas en un bulldog: bajo, corpulento, de nariz chata y cabeza enorme.
Aspecto físico
Son esas cabezas las que realmente les hacen destacar. Aparentemente, tan grandes como el resto de su cuerpo, estas enormes cabezas son extremadamente anchas, con pliegues de piel que cuelgan alrededor de la nariz para dar la apariencia de arrugas. También suelen tener un notable prognatismo.
La razón de estas características es sombría. Estos perros fueron criados originalmente para un espantoso deporte llamado “bul-baiting” que significa “hostigamiento de toros”, en el que una manada de bulldogs se lanzaba sobre un toro atado. El perro que pudiera agarrar al toro por la nariz y tirarlo al suelo sería el vencedor.
Como resultado, los perros necesitaban cuerpos fornidos, cabezas extremadamente fuertes y una piel que no fuera propensa a desgarrarse. Afortunadamente, el bull-baiting es ahora ilegal (y estos perros ya no son capaces de soportar tanto ejercicio de todos modos), pero los rasgos físicos de la raza permanecen.
Personalidad y disposición
A pesar de su pasado y desde el punto de vista del temperamento, hay pocas cosas en estos perros que sugieran que fueran capaces de ser violentos. Son perros increíblemente dulces y educados, aunque pueden resultar eficaces como perros guardianes si es necesario.
Por desgracia, no es una raza especialmente sana, ya que generaciones de endogamia les han dejado algunos problemas de salud bastante graves. Sus hocicos se han vuelto progresivamente más rechonchos con los años, lo que les dificulta la respiración, por lo que el ejercicio vigoroso es prácticamente imposible para estos perros (muy parecido a Winston Churchill, ahora que lo pienso).
Salud y esperanza de vida
Además, su cabeza es tan grande que es muy raro que un bulldog inglés dé a luz de forma natural, y la mayoría tienen que nacer por cesárea. Como resultado, a menudo sólo se pueden conseguir a través de criadores, y tener tu propio cachorro puede ser muy caro.
También tienden a estar predispuestos a la displasia de cadera, lo que puede hacer que sufran bastante en sus años dorados. Las principales causas de muerte de estos perros son el paro cardiaco y el cáncer, y sólo tienen una esperanza de vida de unos 8 años.
Aun así, los 8 años que pases con estos perros serán sensacionales, ya que son compañeros divertidísimos y agradables que se llevan bien con los niños y otros animales domésticos. Ten en cuenta que, si te haces con uno, puede que te veas obligado a animar a Inglaterra en todos los mundiales.
- Raza poco agresiva
- Bueno para los que quieren sofá
- Mucha personalidad
- Ideal para habitantes de apartamentos
- Necesita un aseo mínimo
- Muchos problemas de salud
- Corta vida útil
- Muy testarudo
- Suelen estar disponibles sólo a través de criadores caros
- Se recalienta fácilmente
Visión general del bulldog victoriano
Aspecto físico
El otro tipo de bulldog es el bulldog victoriano, y son mucho menos comunes. Suelen ser más altos y delgados que sus primos, con cabezas más pequeñas y mejor proporcionadas a sus cuerpos.
Historia de la raza
En realidad, estos perros se extinguieron durante bastante tiempo, ya que sus primos ingleses, más populares, les obligaron a desaparecer. Sin embargo, la raza fue resucitada en la década de 1980 por un criador llamado Ken Mollett, que combinó ejemplares de bulldog inglés con los de bull terriers, bullmastiffs y Staffordshire terriers.
El objetivo de recuperar la raza era crear una versión del bulldog que no sufriera tantos problemas de salud. Por eso son más altos, con hocicos más pronunciados y cabezas más pequeñas.
Salud
Como resultado, consiguen eludir muchos de los problemas que afectan a sus primos. Los bulldogs victorianos pueden parir de forma natural, ya que sus cabezas más pequeñas no corren mucho riesgo de atascarse en el canal del parto, y tienen un riesgo muy reducido de padecer cáncer y enfermedades cardiacas. Además, suelen vivir entre 12 y 14 años, lo que te permite pasar más tiempo con tu querido compañero.
Temperamento:
Aparte de eso, son muy parecidos a los bulldogs ingleses. Siguen teniendo una complexión fornida, cara arrugada y un prognatismo menos pronunciado. También suelen compartir los mismos rasgos temperamentales, ya que les encanta llamar la atención y rara vez muestran agresividad.
Es probable que no notes mucha diferencia entre los dos si tienes un victoriano después de haber tenido un inglés, hasta que te des cuenta de cuánto has ahorrado en facturas veterinarias. Por otra parte, son difíciles de encontrar, y tendrás que pagar un dineral para hacerte con uno.
- Mucho más sanos que los bulldogs inglés
- Responden bien a la formación
- Necesidad de ejercicio moderado
- Genial con los niños
- Amigable con los extraños
- Difícil de encontrar
- Caro de comprar
- Puede seguir sufriendo problemas respiratorios
- No es ideal para propietarios activos
- Más caro de alimentar
Entonces, ¿cuál es mejor?
Si hay algo que debes saber de nosotros, es que nunca diríamos que un perro es mejor que otro. Todos los perros son maravillosos y deben ser apreciados.
Dicho esto, los bulldogs victorianos son probablemente mejores. Básicamente, son el mismo perro, pero con menos problemas de salud y una vida más larga. ¿Quién no quiere eso?
Por supuesto, con esto no pretendo menospreciar en modo alguno a los bulldogs ingleses. Cualquiera que haya estado cerca de uno sabe que son unos bobalicones maravillosos, y serás afortunado si tuvieras uno en tu vida. Es desgarrador verlos sufrir por problemas de salud, por no hablar de que los perdemos años antes de lo debido.
Así que, aunque cualquiera de las dos razas sería una fantástica incorporación a tu hogar, ¿por qué no te ahorras (y ahorras a tu perro) algo de dolor e inviertes en un bulldog victoriano? Si encuentras uno, tendrás todas las ventajas de los bulldogs ingleses normales, con muchos menos inconvenientes.
Pero tendrás que soportar muchas babas y flatulencias. Eso no se puede criar.
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