Los 6 colores del labrador: un repaso completo (con fotos)
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El labrador retriever es quizás el perro más reconocible a lo largo y ancho del país. Todos los años son elegidos como la raza más popular de Estados Unidos. Tienen una personalidad amorosa y divertida así como un corazón gentil y complaciente que hace de ellos la mascota ideal para la familia.
El American Kennel Club reconoce tres colores: negro, amarillo y chocolate. La mayoría conoce los tres colores principales, pero si quieres un perro cuyo manto tenga un pequeño toque de rareza y originalidad, ¡tenemos un labrador para ti también! A continuación haremos un repaso por los distintos colores del labrador y las diferencias que presenta cada uno. También analizaremos qué es lo que hace a estos perros tan reconocibles.
Los colores del labrador en fotos
1. Labrador negro
Los labradores negros tienen un manto negro puro lustroso y brillante. Los suelen escoger como perros de caza, pero también son maravillosas mascotas no laborales.
Estadísticamente hablando, la variante negra es la más común entre los labradores. Esto se debe a la forma en que esta raza hereda su color de su manto. Sin adentrarnos demasiado en una explicación científica, existen nueve posibles combinaciones genéticas que determinan el color del manto. Cuatro de estas dan como resultado un manto negro, tres en amarillo y sólo dos en chocolate. Esto significa que casi la mitad de los labradores son negros.
Algunos dicen que los labradores negros son los más calmados y afectiosos dentro de la raza, pero no existe evidencia que apoye esta teoría.
2. Labrador amarillo
El color del labrador amarillo tiene un rango bastante amplio, de hecho dos de los colores que veremos más adelante no son sino extremos en el espectro de color del labrador amarillo. Su manto suele presentar un tono marrón claro o bronceado que da la impresión de ser amarillento.
Se dice que es el más amistoso de los labradores, pero tampoco existe nada que demuestre esta afirmación.
3. Labrador chocolate
El labrador chocolate es precioso y adorable, con un manto marrón oscuro que se asemeja al chocolate. Su color es el más raro entre los tres colores principales del labrador. La intensidad y la tonalidad del color chocolate puede variar bastante. Incluso dos labradores chocolate de la misma camada pueden tener un manto cuyo color varía entre marrón claro y lo que se podría describir como la mezcla entre un labrador chocolate y un labrador negro.
Los labradores chocolate se consideran los más activos y difíciles de adiestrar, y aunque no haya evidencia sólida que lo respalde, son los únicos labradores que no se utilizan como perros de servicio, lo cual puede estar relacionado con su alto nivel de energía.
Esto también puede ser debido a que el labrador chocolate suele tener más problemas de salud y una esperanza de vida más corta que el labrador negro o el amarillo. En promedio, un labrador chocolate vive un año y medio menos que los demás.
4. Labrador rojo
El labrador rojo, también llamado rojo zorro, tiene un manto de un color rojo intenso que se asemeja al de un zorro. Este no es en absoluto el resultado de otra combinación genética, es el extremo del espectro de color del labrador amarillo. En otras palabras, tiene la genética de un labrador amarillo pero presenta un manto más oscurro, llegando a verse rojizo.
Como a nivel genético es idéntico a su hermano amarillo, no presenta problemas de salud adicionales, y tanto su esperanza de vida como su salud coinciden con las de un labrador amarillo o negro.
Los labradores rojos son más inusuales que los amarillos simplemente porque lo que más se suele ver son labradores color marrón claro o amarillento y no tanto rojo intenso.
5. Labrador retriever blanco
Al igual que el labrador rojo, el blanco suele ser ídentico al amarillo a nivel genético, pero su manto se ubica en el extremo más claro del espectro de color de este último. Normalmente su pelaje es de un marrón muy pálido que da la impresión de ser totalmente blanco, sobre todo en el sol, con matices amarillentos alrededor de sus orejas y en la base de sus patas.
El labrador blanco no presenta problemas de salud adicionales, a menos que su color sea el resultado del albinismo. Los labradores albinos también pueden considerarse blancos, pero tienen una mutación genética que limita la producción de color de su manto. A diferencia de los blancos, los labradores albinos sí que pueden tener otros problemas de salud como sordera, ceguera y otras patologías oftalmológicas.
6. Labrador plateado
El labrador plateado es impactante, majestuoso y pulcro. Su manto produce un hermoso brillo bajo el sol, y su apariencia es tan llamativa como encantadora.
Estos cachorros se asemejan a los labradores rojos en que su genética es la misma que la de uno de los tres principales. En realidad el labrador plateado no es más que un labrador chocolate (a pesar de que se parezca más a un labrador azul), sólo que su manto se ve esclarecido o diluído, dando como resultado una apariencia “platosa.”
Como su hermano chocolate, lamentablemente hereda algunos problemas de salud y tiende a vivir menos que el labrador negro o el amarillo. También son propensos a padecer alopecia por dilución de color, un trastorno genético que puede dar lugar a un pelaje con parches y problemas cutáneos.
Características físicas definitorias
¿Qué es lo que hace tan reconocible a esta raza? Los labradores suelen ser robustos y atléticos, de pecho prominente y macizo, cráneo ancho, además de sus tiernas orejas caídas y unos ojos tan expresivos que podrías jurar que intentan decirte algo.
Los labradores tienen un manto corto y denso, impermeable. De hecho llevan el nombre del Mar labrador de Terranova, donde se los criaba originalmente para recuperar aves acuáticas. Tienen lo que se conoce como “cola de nutria”, ya que el pelaje que la rodea le da un aspecto espeso y redondo.
Carácter y comportamiento del labrador
Normalmente se dice que es la raza perfecta para la familia por su carácter gentil, proactivo y muy amistoso. Nunca son una causa de preocupación en presencia de niños pequeños o extraños, pero así mismo no dudarán en protegerte ante una amenaza de ser necesario.
Son perros energéticos y muy juguetones, y se les da particularmente bien nadar y, por supuesto, recuperar cosas. No importa dónde estén, los labradores traen alegría y felicidad. Son fieles, amorosos y demostrativos. ¿Qué más puede uno pedir en un perro?
Cuidado y aseo del labrador retriever
Ya sea que tengas un labrador de uno de los tres colores principales o una de las versiones alternativas, el cuidado del manto es el mismo para todos.
El pelaje corto y denso del labrador es muy propenso a la caída y a endurecerse, por lo que deberás cepillarlo al menos dos o tres veces a la semana para reducir la caída y mantener su aspecto liso y pulcro. El cepillado normal ayudará a distribuir los aceites naturales de la piel de tu cachorro, aportándole un aspecto sano y luminoso, pero no evitará la caída. Si no tienes una buena aspiradora será mejor que inviertas en una antes de traer tu labrador a casa.
Los labradores de todos los colores deberían bañarse más o menos cada dos meses con shampoo para perros. Bañarlos más a menudo presenta el riesgo de eliminar esos aceites saludables de su piel que mencionamos antes, así que trata de no bañar a tu cachorro más de lo necesario, a menos que sus andares lo lleven a meterse en el barro.
Consideraciones finales
Si bien los colores principales son tres, los labradores pueden presentar muchos tonos diferentes que les brindan una apariencia única y particularmente llamativa. Independientemente de su color, tu cachorrito siempre estará lleno de vida y optimismo, y su propósito será darle a la familia muchos años de risas y felicidad.
Crédito de Imagen Principal Eric Isselee, Shutterstock
