Hepper es apoyado por sus lectores. Cuando compras productos por medio de enlaces en nuestro sitio, nosostros podríamos obtener una comisión por afiliación sin costo extra para ti. Más información aquí.

Cómo cuidar a un gato maltratado: 9 consejos (veterinaria responde)

Dr. Kim Podlecki, DVM (Vet)

By Dr. Kim Podlecki, DVM (Vet)

Gato blanco con ojos azules y la mirada triste

Vet approved

Dr. Kim Podlecki Photo

Reviewed & Fact-Checked By

Dr. Kim Podlecki

DVM (Veterinarian)

The information is current and up-to-date in accordance with the latest veterinarian research.

Learn more »

Las Sociedades Humanitarias, las casas de acogida y los refugios están desbordados por el número de gatos que necesitan ser adoptados. Algunos de estos gatos fueron recogidos de una situación de salvajismo en el exterior, mientras que otros pueden haber sido abandonados por propietarios anteriores que ya no podían ocuparse de ellos. Algunos gatos pueden haber estado en situaciones de maltrato causadas por sus anteriores dueños. Otros gatos pueden haber sido encontrados como vagabundos tras haber sido abandonados por un propietario maltratador o haberse escapado.

A menudo, si un refugio o una sociedad humanitaria o defensora de los animales sospecha o sabe que un gato concreto ha sufrido malos tratos, intentará destinarlo a un hogar de acogida de confianza. Estar en un refugio puede ser aún más traumático para ese gato. Cuidar de un gato maltratado requiere paciencia, amor y tiempo. A continuación encontrarás nueve consejos útiles para cuidar a un gato maltratado.

hepper single cat paw divider

Los 9 mejores consejos de un veterinario para cuidar a un gato maltratado

1. Mantén la calma y habla en voz baja

Sin saber exactamente por lo que ha pasado tu gato, cabe suponer que es probable que a un gato maltratado le hayan gritado con frecuencia, y puede que también lo hayan maltratado físicamente. Cuando trates de cuidar a un gato maltratado, alzar la voz (ya sea hacia él o en su presencia), puede causar mucho estrés. Cuida siempre muy bien el tono y el volumen de tu voz. Intenta mantener una actitud y tono de voz relajados cuando hables con el gato o con cualquier otro animal de la casa.

Además, ten en cuenta cómo hablas con las personas de la casa que están cerca de tu gato. Aunque no le estés gritando directamente, cualquier voz fuerte o alterada en casa puede causar a tu gato un trauma mayor. Acostumbrarse a ser paciente y mantener un ambiente silencioso y tranquilo es beneficioso.

Gato blanco siendo acariciado a plena luz del sol
foto por: AleksDaria, Shutterstock

2. Muévete despacio

Un gato maltratado puede asustarse fácilmente con ruidos fuertes, movimientos bruscos y comportamientos imprevisibles. Moverse rápidamente en presencia de tu nuevo gato puede ponerlo nervioso. Los gatos domésticos, por naturaleza, suelen huir cuando se asustan, tienen ansiedad o se sobresaltan. Un gato reactivo puede arremeter contra las personas u otros animales de la casa si se siente amenazado. Incluso si el movimiento pretende ser juguetón, un gato maltratado puede entender los movimientos rápidos y bruscos como una amenaza. Muévete despacio y recuerda utilizar una voz tranquila hasta que tu gato confíe más en ti y en su entorno.


3. Proporciona a tu gato un espacio seguro

Un gato maltratado necesita un lugar donde pueda dormir, esconderse, calmarse y sentirse seguro. Los gatos suelen trepar y esconderse a menudo. Por tanto, un espacio seguro para un gato maltratado puede ser un árbol para gatos en un lugar tranquilo, una cama donde pueda esconderse o incluso una habitación propia. Es muy importante que, una vez establecido el espacio seguro de tu gato, todos los habitantes de la casa lo respeten. Eso significa que si vienen nuevos familiares, amigos o niños que no viven con tu gato, también deben respetar su espacio seguro.

Si tu gato se retira hacia su pequeño templo, o tú decides ponerle allí para que esté tranquilo, nadie puede molestarle. No hay vuelta de hoja. Por mucho que los niños quieran jugar con el gato, deben respetar su espacio. Recuerda que es su espacio seguro, e invadirlo romperá la confianza.

Gato asustado debajo de la cama
foto por: zossia, Shutterstock

4. Dale tiempo a tu gato para que se cure y confíe

Tanto si tu gato ha sufrido maltrato físico, verbal, negligencia o todo lo anterior, necesitará tiempo para volver a confiar en los demás. Algunos gatos confiarán inmediatamente en su nuevo dueño, pero estarán nerviosos ante su nuevo entorno. Otras veces, los gatos maltratados no confían en las personas y sólo confían en su espacio seguro. Sea cual sea el motivo, ¡ten paciencia! Las personas no se curan inmediatamente de los malos tratos y los acontecimientos traumáticos; ¡los gatos tampoco!


5. No hagas contacto visual directo

Algunos gatos que hayan sido maltratados pueden estar muy nerviosos y se tomarán el contacto visual directo como un desafío. Como personas, se nos enseña a establecer contacto visual cuando hablamos con la gente para ganar confianza y mostrar seguridad. Sin embargo, el contacto visual directo en los animales puede tomarse como un desafío. No establezcas contacto visual directo, sobre todo en momentos en que puedas sentirte frustrado con tu gato maltratado.

Gato negro con ojos verdes encogido y bufando
foto por: PDPics, Pixabay

6. No te acerques enseguida a la cabeza y a la cara

Acercarte a tu gato directamente, ya sea caminando o acercándote a él, puede desencadenar un comportamiento protector y reactivo. A menos que tu gato esté en peligro inmediato y tengas que actuar con rapidez, no te acerques directamente a su cabeza, las orejas o el cuello. Suelen ser zonas del cuerpo que se golpean, tiran, retuercen y manipulan para causar dolor en casos de maltrato. Tu gato puede ser muy protector con su cara y su cabeza. Ve despacio, e intenta empezar rascando el lateral de la cara, el cuello y las orejas. Si se inclinan hacia ti y parece que les gusta la acción, ve avanzando poco a poco hacia la parte delantera de la cara.

Además, a muchos gatos no les gusta que les acaricien ¡y mucho menos que les froten la barriga! Mientras que los perros suelen darse la vuelta en señal de sumisión para que les froten la barriga, los gatos pueden reaccionar y atacar cuando intentas acariciarlos ahí. En general, ve despacio con tu gato maltratado y aprende dónde le gusta que le muestres afecto. Puede que descubras que a tu gato nunca le gustan los mimos y que nunca le gustará que le acaricien. ¡Y no pasa nada! Permite que tu gato te muestre lo que le gusta y lo que no, y respétalo.


7. Utiliza el refuerzo positivo

¡Recompensa y anima a tu gato a confiar en ti con refuerzos positivos! Para ello, puedes emplear ricas y sabrosas golosinas, juguetes o afectos. Tu gato se encargará de mostrarte lo que más le gusta. Algunos gatos pueden no querer nada al principio, ya que estarán demasiado nerviosos y cerrados a cualquier tipo de estímulo. Cuando les des tiempo, es probable que respondan positivamente a una o varias formas de refuerzo positivo. Cuando ofrezcas golosinas o un juguete, ponlo siempre en el suelo u ofrécelo con la palma de la mano abierta. Hay que recompensar cada pequeño paso que den para salir de su caparazón y adoptar una actitud más social y segura de sí mismos.

a tabby cat being fed a cat treat by hand
Foto por: Jakub Zak, Shutterstock

8. Deja que se acerquen a ti

Esto va de la mano con todo lo que hemos discutido hasta ahora. Como ya se ha dicho, ser ruidoso, moverse con rapidez o agresividad, perder la paciencia, no respetar un espacio seguro y ofrecer refuerzos negativos no serán beneficiosos cuando cuides de un gato maltratado. Permitir que tu gato tenga tiempo, espacio, tranquilidad y atención cuando lo desee le ayudará a salir de su caparazón, a su debido tiempo. La clave es tener paciencia y dejar que vengan a ti.


9. Busca ayuda profesional

Algunos casos de maltrato son graves. Tu nuevo gato puede tener heridas físicas, emocionales y mentales previas tan graves que necesite ayuda profesional. Ponte en contacto con tu veterinario para asegurarte de que tu nuevo gato está físicamente sano y cómodo. Los veterinarios de conducta también son una buena opción en casos de maltrato grave, ansiedad, destrucción y violencia. Los veterinarios especialistas en comportamiento tienen experiencia en estos casos y han recibido una formación y educación rigurosas para ayudar a los gatitos. Ten cuidado con los adiestradores, criadores u otras personas que afirman ser expertos en comportamiento. A menudo, estas personas no tienen formación médica y pueden acabar causando más daño que beneficio.

Gato blanco y negro de orejas grandes en una clínica veterinaria
foto por: Maria Sbytova, Shutterstock

hepper cat paw divider

Conclusión

Cuidar a un gato maltratado requiere tiempo y paciencia. Recuerda que la curación requiere tiempo y espacio. Utilizar una voz tranquila, moverte despacio, no precipitarte con tu gato, ofrecerle refuerzos positivos y darle un espacio seguro le ayudarán a confiar en ti como su nuevo dueño.

Considera la posibilidad de obtener ayuda profesional de un veterinario especialista en comportamiento si tu gato es un caso grave de maltrato, o si ninguno de estos consejos parece ayudar. Ten cuidado al recurrir a adiestradores, criadores u otras personas que afirman ser expertos en comportamiento, sobre todo si no tienen formación profesional al respecto.


Crédito de Imagen Principal: Darwis Alwan, Pexels

Artículos relacionados

Otras lecturas

Artículos veterinarios

Respuestas populares de veterinarios

Las últimas respuestas de los veterinarios a las preguntas de nuestra base de datos.